Una buena limpieza de tus zapatos es fundamental para el buen mantenimiento y durabilidad de los mismos. Si quieres y aprecias a tus zapatos es conveniente que sigas nuestros consejos de principio a fin. No es lo mismo una piel de acabado Ante o Serraje que otra de Piel Vacuno o Becerro brillo, ni tampoco una piel de Fantasía como unos Tejidos técnicos. Por este motivo os dejamos estas recomendaciones para la reparación y mantenimiento de las pieles de tus zapatos.
Pieles de Origen Vacuno o Becerro lisas o con grabados:
1. Limpia tus zapatos con una esponja o paño húmedo con jabón neutro.
2. Una vez limpios déjalos secar. Nunca les debe dar el sol directamente ni secar encima de radiadores o secadores.
3. Dar crema nutriente de su color o incolora por toda la superficie y dejar absorber.
4. Cepillar con fuerza y rapidez hasta conseguir el brillo y textura deseado. Este proceso se podrá repetir las veces que creas necesario.
5. Ahormar los zapatos con papeles de periódicos prensados para recuperar la forma original.
Pieles de acabado Ante o Serraje:
1. Limpia tus zapatos con una esponja o paño húmedo con jabón neutro.
2. Una vez limpios déjalos secar. Nunca les debe dar el sol directamente ni secar encima de radiadores o secadores.
3. Dar Spray especial para estas pieles de su color o incolora por toda la superficie y dejar absorber.
4. Cepillar con un peine específico para antes o serrajes.
5. Ahormar los zapatos con papeles de periódicos prensados para recuperar la forma original.
Pieles de acabado Metalizado o Fantasía:
1. Limpia tus zapatos con mucho cuidado con una esponja o paño seco.
2. Este tipo de pieles estampadas o metalizadas para su reparación requieren de productos muy específicos y determinados. Ponte en contacto directo con la casa o comercio para aconsejarte la mejor opción.
3. Nunca uses productos agresivos que puedan dañar su naturaleza.
Tejidos:
1. Usa productos específicos para tejidos como los que se usan en la ropa o en las tapicerías de sofás o similares. Nunca uses productos agresivos que puedan deteriorar la naturaleza del artículo.
Y recuerda, nunca metas tus zapatos o sneakers en la lavadora. Estos procesos de limpieza deterioran de manera significativa los componentes usados en la fabricación de los mismos.
